En la vida real, el comportamiento de muchos productos depende de su interacción con fluidos, ya sean gases, líquidos o una combinación de ambos. La simulación de dinámica computacional de fluidos (CFD) ofrece la capacidad de simular y predecir el comportamiento de flujo y transferencia de calor bajo múltiples escenarios. 

Una de las principales ventajas de la simulación CFD es la posibilidad de observar, en tres dimensiones (3D), lo que sucede en el interior de los equipos industriales, tuberías, intercambiadores de calor, compresores, calderas, sistemas de bombeo, plantas de tratamiento, separadores de crudo, tanques mezcladores, procesos de combustión, Aero e hidro Dinámica, entre otros.